"Manual de la aprendiza de depredadora" de Alicia Misrahi
9:30 a. m.Título: Manual de la aprendiza de depredadora
Autora: Alicia Misrahi
Editorial: CEAC
Género: Ciencias humanas. Psicología.
Páginas: 240
Precio: 17,95€
Sinopsis:
Tienes entre manos un libro provocador. Ábrelo sólo si eres una persona sin complejos, de mente abierta y dispuesta a vivir tus relaciones de forma desinhibida. Abstente si vas con tus prejuicios por delante. Vamos a cuestionarnos los roles de hombres y mujeres en nuestra sociedad, cómo transgredir los tópicos, nuevas formas de relación de pareja y desenmascararemos las grandes mentiras de los cuentos de hadas.
Las depredadoras observamos, escuchamos y analizamos atentamente la situación, y si la presa nos interesa, atacamos. ¡Y lo mejor de todo es que nos lo pasamos en grande!
Opinión de MJ:
Empezamos por esa gran portada. Fondo rosa, mujer de buen ver llevando un vestido de leopardo y lanza (recordad gente, habla de depredadoras), un gran círculo negro con una mordida en su parte inferior, y el subtítulo: Todos los secretos para seducir y disfrutar de tu cacería.
Nadie puede negar que la portada es directísima, además de cuidada por los detalles de la ropa, los adornos, la lanza, la dentada, la sonrisa torcida... Está muy currada.
Cuando una se pone con este libro, lo ideal es tener claro que no se va a leer una novela, sino un "manual", sin que sea tan soporífero como los del instituto o universidad. Esto lo pongo porque ya se sabe que si alguien coge un libro cualquiera pensando que se encontrará con x cosa o estructura, y luego no es así, termina decepcionando, y no tiene que ser cosa del libro, sino de nosotr@s.
Teniendo esto claro, al abrirlo nos llevamos la sorpresa de su edición, la cual me ha encantado. Como buen manual que es, está lo redactado por la autora, intercalando cuadros explicativos de algo mencionado por encima, y además, otros cuadrados oscuros que son ejercicios prácticos para llevar a cabo lo que acabamos de leer. Es algo muy curioso y que queda de maravilla en el libro.
Si la portada y la edición están muy trabajadas y cucas, lo narrado también. Alicia Misrahi escribe con muchísimo desparpajo y sin pelos en la lengua, creando algunas escenas muy divertidas; lo que no quita que cuando tiene que ponerse seria y crítica, exponga sus ideales con todos sus pros y sus contras, todo bien justificado.
Tal y como sale en la sinopsis, es un libro provocador por decir claramente que las mujeres sí podemos y debemos (si queremos), hacer aquellas cosas que se creían solo del reino masculino en lo que se refiere a las relaciones. Sí podemos ir de flor en flor si nos apetece y no atarnos a nadie si no queremos, sin dejar de ser chicas y convertirnos en putas. ¿Por qué los chicos que van de una a otra son unos machotes y las chicas unas desvergonzadas? Si ambos quieren, ¿por qué está mal no unirse a alguien para siempre? Si una chica es feliz viviendo sola, ¿por qué debe unirse? ¿Por qué la gente la mira mal por no vivir con un hombre?
Estos temas y otros muchos son sobre los que Alicia escribe y medita. Estamos en el siglo XXI, todavía hay mujeres que arrastran roles que ya deberían haber abandonado, y la autora se encarga de ir desmontándolos uno a uno a base de argumentos y risas.
Además también nos encontramos con los "pasos" a seguir si alguna decide pasar a ser depredadora y no dejarse siempre llevar. Arreglarse, quererse, intentar vencer la timidez, trucos para las primeras (y últimas) veces, consejos, etc.
Aunque pueda parece que es un libro pesado por el tema de ser una especie de "manual", no lo es. Gracias a la forma de escribir de la autora, esa edición tan cuidada y sus razonamientos tan justificados, no solo consigue que el libro se lea rápido y alguna que otra risa, sino que en la mayor parte del tiempo estés asintiendo con la cabeza dándole la razón.
Debo reconocer que coincido casi totalmente con la autora. Me parece muy tonto (por no poner otra palabra más dura) que sigamos con esos roles, y no, no me vale la típica excusa donde me decís que la sociedad os oprime y demás... Muchas veces somos nosotras mismas las que nos tiramos los trastos las unas a las otras en cuanto vemos que una chica (conocida o no), se lleva a la cama a chicos diferentes en vez de estar solo con uno. Esto es lo primero que debemos cambiar.
En lo único en lo que no estoy de acuerdo con ella es en cierto capítulo de su libro donde da la sensación de que arremete a lo bestia contra las mujeres que deciden optar por tener pareja estable. He puesto "parece" porque Alicia es la primera en poner que lo primero de todo es encontrar la felicidad, esté en la pareja estable o viviendo como depredadora. El pero es que aunque lo dice en varias ocasiones a lo largo del libro, hay un capítulo en concreto en el que creo que además de cebarse un poquito más de la cuenta, no comparto su forma de pensar.
El capítulo del que hablo es el que dedica al amor. Aquí mete en el mismo saco el enamoramiento y el amor (o eso me pareció a mí), y aunque las dos palabras se parezcan muchísimo, soy de las que piensan que no son lo mismo. Además, señala como culpables a otros.
El enamoramiento puede ser pasional y pasajero, pero también el inicio de cualquier relación "romántica" (dícese duradera), una relación normal. Pienso que tanto en el primer caso como en el segundo, se caracteriza por lo mismo: Pasión, no parar de pensar en el otro, estar más feliz que unas pascuas, que no se acaben los temas de conversación con la pareja, etc, etc, etc.
Esta etapa siempre acaba. Puede ser que fuese eso, un simple enamoramiento en el cual se lo han pasado bomba, o ser el fin de la "etapa idílica" y a partir de ahí comience una relación romántica normal.
La autora, en este capítulo pone un recuadro que titula "las exigencias del amor", poniendo que según Graciela Ferreira, las exigencias, entre otras, serían:
-Depender de la otra persona postergando lo propio.
-Sentir que nada vale tanto como esa relación.
-Pensar todo el tiempo en la otra persona, hasta el punto de no poder trabajar, estudiar, comer, dormir...
-La entrega total a la otra persona.
Y otras muchas cosas. Lo que acabo de poner no me parece que sea del enamoramiento, sino de un problema de obsesión y dependencia. Sí, al principio todo es como andar por las nubes, pero pasado un tiempo, si todo sigue igual y "no eres capaz de respirar si la otra persona no está a tu lado", claramente algo falla. Y no, no creo que por narices tenga que ser culpa de la educación machista (que hace mucho) o porque el hombre sea un tirano o futuro maltratador. El problema es ella.
Soy de las que piensan que no todo es culpa de una infancia dura o cosas por el estilo como salen en muchas novelas, pelis y noticias. Ahora estamos en plena moda de "se ha vuelto loco por la vida que llevó"... No, señoras y señores. Aquí que nadie se lave las manos tan rápidamente. La educación machista siempre ha exististido (mucho más duramente antes que ahora), y si en el siglo XXI, en su propia casa, ya de adulta decide seguir igual, no apuntemos con el dedo a otros. Seguramente su decisión no haya sido meditada (nadie quiere estar sometida a otra persona), pero no le quitemos su parte de culpa por no pararse a pensar las cosas y poner trabas cuando debía de haberlas puesto. Ahora el padre no nos busca marido/novio/pareja, ahora el padre no decide qué será de nuestras vidas, así que, repito, menos señalar a otros y más reprenderse a una misma por agachar la cabeza.
La llamada "solidaridad" entre chicas me parece bien si se hace con cabeza, es decir, diciendo las cosas claras y reprendiendo a quien se lo merezca, sea chica o no. De otra manera jamás aprenderemos.
También utiliza mucho el término "esclava del amor", y es algo que tampoco me parece bien. Sí, pertenece al mismo capítulo del que hablaba.
He pasado por las dos etapas. La de "que me quiten lo bailado" y "prefiero relaciones estables", y por eso no me parece bien que utilice "esclava del amor". Esto lo dice justo después de lo que he comentado arriba, de que en teoría, las mujeres dejamos de ser personas para ser esclavas de los hombres. Ya he dicho que no es así. Eso es generalizar muchísimo, y las generalizaciones llevan a error.
Con 16 años estaba en plena relación con un chico (duró casi 3 años), y en ningún momento dejé que me pusiese por debajo de él, y eso que inconscientemente de vez en cuando decía o hacía algo machista/sexista del tipo: "Sí, entra en la universidad y luego ya te quedas en casa cuidando de los niños" o cosas por el estilo. ¡Anda que no le dejaba claro en esas ocasiones que de eso nada!
Si una persona está con otra, ni de coña tiene que ser esclava del otro. Si la chica lo es, repito, será porque se ha dejado, porque no reaccionó a tiempo o lo que sea, pero no porque tenga que ser así por huevos. No creo que se tenga que utilizar ese término para englobar las relaciones. La gran mayoría de las relaciones son sanas y evolucionan para mejor. El caso sería el de mis padres. Mi padre se crió en un pueblo pequeño, así que imaginad cómo fue educado; y mi madre es hija de un guardia civil de los de antes, criándose en un cuartel... Vamos, educados con los esteriotipos machistas. Y desde que tengo memoria, ambos trabajan, ambos se ponen los findes a limpiar la casa, ambos van a comprar al mercadona, y mi padre más de una, dos y tres veces hace la comida para que mi madre descanse. Por cierto, su tortilla de patata es mil veces mejor que la de mi madre, tanto que no dejamos que ella las haga xD
Resumiendo. La lectura de este capítulo en concreto deja la idea de que la autora va totalmente en contra de las relaciones duraderas. Da la sensación de que cree que todas son tormentosas, cuando ni por asomo es así. Obviamente hay de todo, el problema es que solo se escucha lo escabroso (noticias, prensa), pero eso no significa que la otra opción, lo normal, no exista.
Quitando ese capítulo, que no es malo, (simplemente no me convenció) el libro está muy bien para recapacitar sobre nuestro papel y estatus en la sociedad. La única pega que le pongo a la novela es su pegado. Las últimas 50 páginas del libro las tengo casi totalmente despegadas, es fastidioso y engorroso. La editorial debería tener cuidado con estas cosas.
4 duermevelas
Wow, menuda reseña!!! El libro no creo que lo lea, pero la verdad es que pienso como tú. Somos nosotras mismas las primeras que nos ponemos la zancadilla unas a otras, y no sólo en temas de relaciones, sino en todo. Nos quejamos de que nos tenemos que depilar, pero es que en cuanto vemos a una que no lo hace, la criticamos. Damos asco, así, en general.
ResponderEliminarYo también pienso que no hay NADA de malo en pasar de tío a tío, siempre que ambas partes sepan lo que hay. Yo he tenido etapas de relaciones estables y otras de rollos de una noche y no me avergüenzo más que de una porque le hice daño a un amigo. Es una larga historia ;)
Tampoco creo que sea sano estar las 24 horas del día pensando en esa persona. Otra cosa distinta es "tenerle presente". Mucho menos obsesivo.
Muy fuerte lo de tu ex, niña. No puedo con esos machismos, y mira que en mi casa es lo que hay (y, como bien dices, porque mi madre se ha dejado), pero yo no pienso tolerarlo. Bliff y yo tenemos las tareas repartidas: yo cocino y me encargo de la ropa y él limpia. Vale que hay cosas que no sabe hacer pero, en vez de hacerlo yo (como hacen muchas tías que se quejan de que sus maridos no hacen nada), le enseño. El desayuno lo está preparando él..., y el otro día, que no me encontraba bien, le fui guiando para hacer la cena. Vamos, que yo no pienso ser "ama de casa" y él lo sabe.
Cualquier opción sana (relación estable o no) me parece respetable.
¡Besines!
No hay nada que añadir a tu comentario xDDD
ResponderEliminarDebo reconocer que es un tema peliagudo, guerra de sexos, que si el sexo débil, que si las mujeres son arpías unas con otras... lo curioso es que algunas de mis amigas piensan así, que somos unas %·&1·"(/&J % y los hombres son mucho más "nobles". Palabras textuales. No mías, desde luego XD
ResponderEliminarCreo que antes que hombres y mujeres, somos personas, y por tanto débiles, fuertes, esclavos, libres, machistas, enamoradizos... de todo, todos.
Yo me tomaría este libro como un rato de asueto ligero. Tomarlo al pie de la letra es declarar la guerra. Como diversión, estoy segura de que en verano sería perfecto ;o)
Besotes depredadores... o no.
No, no. El libro no trata de guerra de sexos, sino de cómo podríamos ser las pertenecientes al género femenino, y no somos... Ya sea por machismo, educación o por nosotras mismas. Trata sobre todo de ir dejando de lado lo que nos decían antes que no debíamos hacer por el simple hecho de ser chicas, de no tirarnos puyas entre nosotras mismas si alguna decide ser más liberal, etc.
ResponderEliminarEstá muy bien para reflexionar ^^
Cuando escribas un comentario ten en cuenta las siguiente cosas:
-Guarda siempre respeto hacia otros comentarios.
-Comenta algo relacionado con la entrada.
-NO se admiten links a otros blogs. Todo comentario que tenga un link externo será eliminado automáticamente.
-Todo comentario que sea del tipo "Me sigues, te sigo", será automáticamente eliminado.