Cuando todo parecía normal. Cuando Meredith Grey por fin superaba sus problemas y dejaba a un lado intentos suicidas, por fin se casa con Derek (que vaya manera de casarse más wtf!) que ya era hora, por favor, después de cinco temporadas, se dice pronto, de idas y venidas, de unos y otras, por fin se deciden ambos. Bien pues después de que todo parezca un mundo feliz y alegre, van y hacen masacre. En Anatomía de Grey, claro.
En un principio dijeron que Katherine Heigl y T.R. Knight se marchaban de la serie, más bien rumores que otra cosa, pues según Shonda Rhimes, que apenas dice nada cuando habla, ninguno de los dos abandona la serie. Y bien, me pregunto yo para que habrán armado tanto follón, con el cancer de Izzie más el atropello de George. Porque si nadie ha dicho que se van, significa que se quedan, y si se quedan no pueden morir (?), entonces qué me explique alguien. Qué es esto si no otra estrategia comercial para que estés tirandote de los pelos para esperar a que llegue septiembre y ver que en el primer capítulo todos se salvan y viven felices para siempre y tan campantes.
Todo esto con el toque estresante que tiene Anatomía de Grey, sumándole las asquerosas operaciones (¿por qué tienen que sacar esas cosas?) y sumándole también el toque cómico y el sentimentaloide, que no pueden faltar.
No se sabe si T.R. Knight estará en la sexta temporada, porque se rumorea que según le quedó el cuerpo a George que podrían sustituirle con otro personajes (le hacen cambio de cara o lo que sea, la cuestión es inventar) , no creo que esto suceda, porque no tiene ningún sentido, además que la voz de George siempre será la voz George... aunque para esto también se pueden inventar cualquier otra chorrada.

Creo que lo mejor de esta quinta temporada ha sido Owen Hunt, el único personaje nuevo que aporta algo interesante, porque Lexie, la de pediatría...etc., son más de lo mismo.
Eso sí, esta temporada hace que no recuerdes la anterior. Te quita el aliento.

Final de Anatomía de Grey (5x24)