Bien se podría decir que este dorama es la típica historia de una joven con una enfermedad incurable que sabe que va a morir en menos de un año. No terminará el instituto o la universidad, no sabrá qué es enamorarse, vivir con la persona que quieres, casarse, tener hijos... Tener un futuro. A los japoneses les encantan estas historias, es más, ellos mismos dicen que les encanta llorar.

Por eso mismo se podría decir que es una historia típica y no equivocarse. Nos presentan a Mioka, una chica joven que está en 3º de carrera y a la que diagnostican una especia de atrofia cerebral. No saben qué enfermedad es, por lo que no hay opción de cura, operación o tratamiento. Morirá.

Obviamente a la chica se le cae el mundo encima, al igual que a sus padres. En este punto es cuando hay un hecho que sí es original, o al menos un tanto innovador. En los doramas de este tipo que he visto, la chica es fuerte, lucha por seguir viviendo su vida normalmente, etc, pero ninguna hace lo que esta chica... Mioka piensa que para lo que queda, mejor liarse la manta a la cabeza y no cortase.

Se vuelve una rebelde (sin llegar a ser mala). Hace lo que quiere, dice lo que piensa, y siempre hace todo lo posible para estar pasándolo bien... Eso sí, jamás con amigos, más que nada porque no tiene amigos, no los quiere. La causa de ello nos la desvelarán a lo largo de los capítulos.

Esta chica no es "socialmente aceptable y útil", tal y como se piensa que debe ser un miembro de la sociedad en Japón.

Por otra parte tenemos a Taichi, un chico también universitario que impide que Mioka lleve a cabo su suicidio en el primer capítulo, no puede ser tan malo lo que le ocurre, ¿no? A partir de aquí y de este chico, Mioka irá conociéndole mejor, conociendo a los amigos de Taichi, y viviendo felizmente, realmente feliz.

Hasta ese momento no se había dado cuenta que para ser verdaderamente feliz se tiene que estar rodeada de amig@s que te quieran y te comprendan. En el tiempo que a ella le queda de vida, aprende eso y enseña grandes cosas a sus amig@s. La vida es un milagro, no hay que desperdiciar ni un solo momento, éste podría ser el último.

Otro punto que me ha gustado mucho, ha sido que no han caído en el típico recurso de que la chica que se queda sin el prota, se ponga ha hacerle la vida imposible a Mioka hasta que sepa de su enfermedad y se arrepienta hasta la médula. No, aquí la chica rechazada tiene corazón y dos dedos de frente para no convertirse en la bruja de la historia y meter cizaña; además, bastante trama hay ya con la enfermedad de Mioka, como para meter algo tan trivial como los celos.

Un aspecto que me parece muy destacable, es el papel del médico. A este actor ya lo había visto en otro dorama que me encanta (es uno de mis preferidos) "Pride", y debo decir que en los dos papeles me ha encantado (¡tengo que buscar más doramas de este chico!). En esta historia vemos a dos médicos totalmente opuestos, tenemos al que nos gustaría matar porque ve a Mioka como un recurso (sí, un recurso, no una persona), para poder saber más de la enfermedad; y luego le tenemos a él, un médico que todavía no ha olvidado que los que van a su consulta son humanos, y más esa chica que sabe que va a morir muy joven. Es muy comprensivo, muy cariñoso, se preocupa muchísimo por Mioka, se da por entero a ella y su caso... Es un trozo de pan. Es el toque humano en el hospital.

La música, cómo no, también tiene un papel importante en el dorama. La verdad sea dicha, tiene un papel menor que en otros doramas de este tipo. Aquí tenemos una música que no siempre está presente, y que cuando lo hace, siempre es más sutil, de forma que el espectador jamás desvíe su atención de lo que ocurre. Iba a poneros el vídeo de la canción principal del dorama, la que se utiliza en el opening, ya que es totalmente preciosa, pero no está en youtube. Si podéis, buscadla por la red y escuchadla.

Resumiendo, la historia es la típica de una joven con enfermedad terminal, pero tiene ligeros toques que la hacen diferente, y que la mejoran considerablemente respecto a las otras historias. Eso sí, recuerdo que es un "drama humano", así que ni se os ocurra visionarlo sin pañuelos al lado, es un error fatal. Los dos primeros capítulos son lacrimógenos, los 3 siguientes no tanto y parece que la historia decae, pero doy fe que los restantes capítulos son para morir deshidratada; y sí, aunque ya se sabe cómo va a terminar, el final no es totalmente triste, recordad lo que he puesto más arriba, ella aprendió de sus amig@s, y ellos aprendieron algo muy importante de ella... "Vivid".