Desde que estaba fuera había sobrevivido a una tormenta de éter, alguien la había amenazado con un cuchillo y había visto hombres asesinados. Pero esto es aun peor.

Aria ha perdido su casa en la protegida ciudad de Ensoñación y sabe que sus probabilidades de sobrevivir en esta tierra agreste son mínimas. Si no son los caníbales, serán las violentas tormentas eléctricas de éter las que acabarán con su vida. Incluso el aire que respira puede matarla. Entonces conoce a un salvaje de nombre Perry. Es salvaje, un salvaje, y su única oportunidad de sobrevivir.

Perry es uno de los cazadores de su tribu y ve en Aria la fragilidad que podría esperarse de una residente. Sin embargo, él también necesita su ayuda: ella tiene la llave para su propia salvación. Aria y Perry son diametralmente opuestos, pero si pretenden sobrevivir tendrán que aceptarse el uno al otro. Su improbable alianza crea un vínculo que determinará el destino de cuantos viven bajo este cielo eterno.

He aquí un libro que me ha gustado muchísimo pero que no sé cómo meterle mano para hacer la reseña. La portada es un poco llamativa y por primera vez ni me gusta más ni menos que las originales, eso sí, todas tienen mucho que ver con la historia. La portada rosa por ese 'globo'/cúpula donde viven los llamados topos, la azul por cómo ella se va descubriendo volviéndose una especie de heroina, y la española con el azul del cielo eterno y a los protagonistas en un bosque, lugar donde pasan gran parte de la historia.