Hace mucho tiempo que quería ponerme con este dorama porque el protagonista es mi querido y amado Park Shi Hoo, pero no sé por qué siempre lo dejaba para más adelante.

La historia es tal y como pone en la sinopsis, los protagonistas se conocen por cosas del destino y se enamoran cuando sus padres son enemigos. El padre de ella es el hermano del rey al cual quiere destronar, mientras que el padre de él quiere mantener al rey en su trono porque el otro es un tirano de tres pares de cojones. Al final el que quería el trono lo consigue empapando con sangre todo lugar que pisa, empezando con la familia que apoyaba al rey... 

El protagonista sobrevive de milagro y jura vengarse. ¿Problema? Que la chica a la que ama es hija de ese desgraciado y no es tan sencillo.

Park Shi Hoo hace un gran papel y no porque sea uno de mis actores favoritos, buscad info y veréis que el resto coinciden en lo mismo. Al principio es todo lo risueño que su personaje necesita que sea para luego convertirse en alguien consumido por el dolor y la ira. 

La protagonista también lo hace muy bien, su papel es de una mujer muy dulce y buena que no duda en plantar cara a su padre cuando se va dando cuenta de cómo es en realidad. 

La única pega que le pongo a estos dos es que hay química pero no demasiada. La verdad es que no sé si esto es así porque entre los dos no había gran cosa o por culpa del guión, el cual para mí está bastante mal hecho y os lo explico ahora.

Tal y como he comentado, al principio todo va bien, se conocen y se enamoran, perfecto. Están así unos ocho capítulos en los que los ves y se te cae la baba para alternativamente aburrirte con los complots de los que quieren derrocar al rey, pero bueno, es lo que toca. Donde todo se va a la mierda es en el momento en el que empieza la venganza...

A partir de ahí se centran mucho más en los complots y venganza, tanto que el romance brilla por su ausencia en lo que resta de dorama y no, eso  no es así. Si la historia va de una trágica historia de amor por una venganza que debe llevarse a cabo, ponedme las dos cosas y no me toquéis los cojones. Gracias.

En esa historia te avasallan con las maquinaciones de ambos bandos y tú te tienes que conformar con una historia de amor de 7 episodios, los del principio, que deben servirte para los restantes 17 capítulos... Mira, no. No me puedes poner un tonteo al principio, decirme que están enamorados y que eso me sirva para la mayor parte del dorama, creyéndome que esos dos pasan por todas esas vicisitudes por varias horas juntos a lo largo de los primeros episodios.

Los guionistas no supieron dosificar y la cagaron a lo grande en eso.

Este dorama me ha gustado pero reconozco que no tanto como otros. En mi opinión le sobran capítulos, tarda en empezar (joder, si va de una venganza  no me tengas unos 8-9 episodios hasta que empieza dicha venganza) y encima, aún siendo también una historia de amor (Romeo y Julieta a la coreana) deja muy de lado el género romántico para centrarse en la lucha...

Además, meten tantísimo drama que al final acabas aburrida de él. Me parece bien que ni de coña les salga todo bien, a ver, luchan contra un rey que tiene infinitos medios para joderles la vida, pero llega un momento que cansa y te vuelves inmune a tanta lágrima, dificultad y tontería. Las cosas claras. 

Menos mal que están los secundarios que  le dan más vida a la historia. Ese rey consorte y la princesa... una bonita historia de amor que sí cocinan a fuego lento haciéndola muy muy muy bonita. Y cómo olvidarme del repentino compañero de nuestro protagonista vengativo, siempre que le veía aparecer en pantalla pensaba que diría: 

Hola. Me llamo Íñigo Montoya. Tú mataste a mi padre. Prepárate a morir.

En fin, que no está mal pero tampoco es de las mejores, con todo tiene una buena crítica en general entre la gente que la ha visionado, así que si queréis darle una oportunidad, mi chico no os defraudará.