Robert McCall, un antiguo agente de la CIA que lleva ahora una vida tranquila, abandona su retiro para ayudar a Teri, una joven prostituta que está siendo explotada por la mafia rusa. A pesar de que aseguró no volver a ser violento, contemplar tanta crueldad despertará en Robert un implacable y renovado deseo de justicia...

Sientiéndolo mucho por mi querido y adorado Denzel Washington, no, esta película no me gustó. Es más, me pareció tan mala que ni me acordaba de qué iba, ni qué pasaba ni nada de nada; he tenido que visualizar el tráiler para acordarme de ella.

Por eso mismo poco os puedo decir, simplemente que para ser una película de venganza, se tira demasiado tiempo (más de la primera mitad de la película) siendo muy lenta, conociendo a los personajes, pensando, hablando, paseando y demás; lo bueno empieza tan tarde que pasa sin pena ni gloria. Llega una vez pasado el límite de "esto ya no lo salva nadie".

Una pena. Para película de venganza con él de protagonista: "El fuego de la venganza".

Un ex-agente de la DEA (Agencia Antidroga) que está viudo se retira a un pequeño pueblo para empezar una nueva vida con su hija de diez años. El único problema es que ha elegido el pueblo equivocado.

Opinión:

De esta pelicula no esperaba mucho, más que nada porque aunque sigo la trayectoria de este actor, que yo recuerde y quitando las de "Los mercenarios", casi no me gusta ninguna película. 

Con todo debo reconocer que su primera mitad me gustó mucho y que si hubiese seguido así, le habría dado al menos un suficiente. El protagonista se retira, se va con su hija a un pueblo pequeñito y apartado, ahi viven los dos felizmente y cuando los problemas llegan, primero los pequeños, sabe sortearlos sin muchos problemas; pero en cuanto entra otra vez el tema de la droga, el malo malísimo y las explosiones y demás... se pierde muchísimo entre los tópicos de las películas de acción.

Una pena que no exprimiesen más algunos temas y que los dejasen abandonados y olvidados para meter peleas, explosiones y tiroteos.

Maléfica es una bella hada con un corazón puro y unas asombrosas alas negras. Crece en un entorno idílico, un apacible reino en el bosque limítrofe con el mundo de los hombres, hasta que un día un ejército de invasores humanos amenaza la armonía de su país. Maléfica se erige entonces en la protectora de su reino, pero un día es objeto de una despiadada e inesperada traición, un hecho triste y doloroso que endurecerá su corazón hasta convertirlo en piedra, y que la llevará a lanzar una temible maldición.

Opinión: 

Contrariamente a lo que creía, esta película me gustó bastante. Si no llega a ser por esos efectos especiales que desentonan tantísimo en la historia, el notable se lo llevaba seguro. ¿Y por qué no un sobresaliente? Porque la historia no es todo lo redonda que debería ser, recayendo sobre los hombros de Angelina Jolie el peso de toda la historia.

Seamos sinceras, la historia no está del todo pulida, le faltan cosillas, cierta magia en algunas partes, ese algo que despierta algo en el interior, pero lo suple con emociones fuertes y hasta contradictorias, y todo gracias (sobre todo) al papelón magistral de la actriz. La verdad es que consigue transmitir todas y cada una de las emociones y sentimientos de su personaje. Se merece un aplauso.

Si no estuviesen esos efectos especiales y la historia fuese un poquitín más redonda, sería perfecta. Y desde aquí ya digo que le he echado el ojo al cuevo de Maléfica, hasta pensé que él sería el elegido, pero mejor así, todo para mí.